ADELINA PÉREZ BLAYA

Os invito a leer estos versos inspirados en pinturas y cuadros de galerías de arte. ¡Que tengais buen verano!

ESCLAVA EN VENTA

Autor del cuadro: José Jiménez Aranda.

Museo de Málaga.



Muchacha,

te miro una y otra vez

y un nudo se forma en mi pecho.

Si aún estás ahí, en el mercado

yo iría a consolarte.

Te pondría un vestido generoso,

para que te sintieras protegida

y pudieras levantar la cabeza,

abrir los ojos.

Quiero ver tu “mirada de mujer”

que ahora está lejos

muy lejos en el tiempo y el espacio,

donde te raptaron.

Iré a verte, lo prometo.



LOS PARAGUAS
Autor del cuadro: Renoir.

National Gallery. Londres.



Sin capa ni guantes, charcos en el suelo,

la joven muchacha escucha al galante

que bajo el paraguas le dice requiebros,



que la mira, atento sólo a su deseo,

pero no la libra de la fina lluvia

¡Hay tanta pobreza, su traje, su pelo!



La joven nos mira, nos dice ¿veis esto?

Porque el caballero no le ofrece nada,

solamente espera robarle algún beso.


LA NIÑA DEL CÁNTARO.
Autor: Greuze.

Museo del Louvre.



El cántaro está roto. Descubierto

el seno; ropa descompuesta; mira

con sereno mirar; viene del huerto.

La linda muchacha, no dice mentira:



algo pasó, pero le queda incierto.

Recuerda, eso si, que alguien estira

la gasa que su cuello deja abierto.

Nota el fin: el galán se retira.



Entonces mira que la jarra rota

ya no lleva el agua que debiera.

¡El cambio que hay en ella no se nota!



¡Quizás en la siguiente primavera,

creciendo el pecho, que hoy apenas brota

lograse que el galán muy más la quiera!.





MAJA Y CELESTINA.

Caprichos.

Francisco de Goya y Lucientes. Colección particular.



No se apoya en la proa de algún barco,

ni la mar es lo que mira atenta.

Alli está para ver y ser mirada:

Si lo consigue puede que haya fiesta.

Sobre el escote, en carne generoso

campea una sonrisa muy sutil

ella sería el disfrute de un esposo

si lo lograra, estamos en abril.

¡Que inocencia derrama su figura!

Pero yo siento su mirada experta.

A su lado es toda compostura

la vieja, que sabemos está alerta.

Hoy no lo logrará, no es un buen día

porque el balcón no queda iluminado.

No logrará ir a su mancebía

con un rico y gentil mozo a su lado.